En muchas de las comunidades indígenas rurales donde trabaja IDM, el machismo y la discriminación a menudo impiden que las sobrevivientes de violencia denuncien el abuso o accedan al sistema legal. Guatemala tiene una de las tasas más altas de impunidad por violencia contra las mujeres en el mundo: el 98% de los casos de agresión sexual y feminicidio quedan impunes. En 2022, el equipo legal de IDM obtuvo una victoria sin precedentes al representar a una niña de 11 años que sobrevivió a una agresión sexual. El caso demostró a la sobreviviente y a la comunidad que la ley puede ser una herramienta poderosa y que los abusadores sexuales pueden rendir cuentas por sus delitos.

IDM recientemente representó a una niña de 11 años que fue abusada sexualmente por su maestra.

Al enterarse de la agresión por parte de su hija, la madre lo denunció de inmediato al director de la escuela. En lugar de actuar, la escuela la presionó para que permaneciera en silencio. Las personas se acercaron a ella con sobornos tratando de convencerla de que no denunciara el abuso. Pero ella no tenía intención de ser silenciada por el abusador de su hija y buscó la ayuda de IDM.

Con el apoyo y acompañamiento legal de IDM, madre e hija denunciaron formalmente el crimen ante el Ministerio Público. A lo largo del juicio, la madre y la hija enfrentaron críticas y fueron condenadas al aislamiento social por parte de su comunidad. Les dijeron que abandonaran el hogar familiar y la madre fue ridiculizada por “exagerar” lo que le pasó a su hija. Su hija enfrentó acoso en la escuela y cada audiencia en la corte resultó emocionalmente agotadora. Muchas veces, la madre se preguntaba si valía la pena el proceso judicial.

Pero con el apoyo de IDM, la madre y la hija se mantuvieron firmes en su decisión de buscar justicia. El equipo legal de IDM brindó apoyo legal integral, incluido el acompañamiento para recopilar y presentar pruebas para el juicio, preparación para el contrainterrogatorio de testigos, asesoramiento legal relacionado con el proceso y referencias para recibir asesoramiento psicológico. La madre atribuye al apoyo emocional y legal de IDM la razón por la que continuaron con el juicio a pesar de todas las reacciones negativas que recibieron.

En octubre de 2022, el tribunal declaró culpable al maestro y lo condenó a 11 años de prisión, la pena máxima por el delito. Se ordenó al acusado pagar reparaciones a la sobreviviente. El juez también ordenó que el Ministerio de Educación local capacite a los administradores, maestros, estudiantes y padres sobre el reconocimiento y la denuncia de la violencia sexual.

“Este caso muestra que a través del sistema de justicia, podemos brindar reparaciones justas a las sobrevivientes de violencia. También es un precedente para el municipio, [que demuestra] que la violencia sexual no está permitida, que la justicia castigará a los agresores sexuales. Esperamos mostrarles a las niñas que sus derechos serán respetados”

Viviana Patal, Directora del Equipo de Asesoría Legal de IDM.

Desde la sentencia, la denunciante ha interpuesto recurso de apelación. IDM continuará representando a la familia del sobreviviente y apoyando la acusación durante todo el proceso de apelación.


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